En un acto como nunca antes se había visto -ni
siquiera en la era priista- el Presidente de la República con la presencia de
todos los dirigentes de los grandes partidos políticos nacionales, dio a
conocer el recién pasado 10 de diciembre del 2012 -al inicio del periodo
vacacional de diciembre- la iniciativa de reforma constitucional anunciada
desde el primer día como presidente y que se refiere a los artículos tercero y
73 de la carta orgánica fundamental. El evento ya había sido anunciado por el
presidente Peña Nieto desde el primer día de su gestión cuando anunció trece compromisos
urgentes de su gobierno y entre ellos estaba el de crear la carrera magisterial
conforme a los méritos académicos, evaluados y reconocidos al margen del
Sindicato de maestros.
Desde el primer día la sola enunciación del
compromiso despertó la mayor ovación del público que abarrotó el patio central
de Palacio Nacional, ahí estaban todos los verdaderos líderes políticos, los
grandes empresarios nacionales, los medios de comunicación de todo el mundo, la
academia, la intelectualidad, las cámaras nacionales e internacionales, el
cuerpo diplomático, los gobernadores y unos cuantos alcaldes de las grandes
urbes, en suma lo que en otros términos
se suele identificar como los poderes facticos de la república, claro que no
estaban presentes ni los diputados, ni los senadores.
El compromiso fue en realidad la declaración
formal de guerra a Elba Esther Gordillo Morales, la líder del Sindicato Nacional
de Trabajadores de la Educación (SNTE) creado por el gobierno de Adolfo López
Mateos para controlar tanto a los maestros como a los trabajadores de la
educación, desde sus primeros días fue un instrumento de control político en
manos del presidente priista de la república en turno y así lo fue todavía
hasta la elección del año 2000 en que el SNTE y sus dirigentes apoyaron las
candidaturas priistas, a pesar de lo cual el PRI fue derrotado.
El caso es que para el 2003 la dirigente del
SNTE, Elba Esther Gordillo se encontraba en pugna con su partido y como medida
defensiva o de represalia contra la dirigencia priista en 2005 obtuvo el
registro del Partido Nueva Alianza (PANAL), que en las elecciones del 2006
postuló al candidato del PAN, Felipe Calderón Hinojosa, es muy dudoso el grado
de importancia que realmente tuvo el SNTE en la ajustada victoria panista, pero
para los priistas la maestra Gordillo fue la pieza clave de la derrota de Roberto Madrazo -un priista por los cuatro costados- Desde
ese momento la maestra es considerada en el PRI como una especie de Judas, que
se vendió por unas monedas y durante seis años se concentró en desprestigiar a
la maestra esperando que dentro del sindicato surgieran nuevos líderes que la
enfrentaran o la derrocaran, lo cual definitivamente no ocurrió y por el
contrario, su control sobre el gremio se fortaleció.
El éxito de la maestra Elba Esther Gordillo
despertó toda suerte de consecuencias, en primer lugar el PRI perdió al
sindicato de maestros como una de sus principales aliados, pero además la
maestra se alineó con uno de sus adversarios, el PAN. No solo la maestra fue
repudiada por el PRI, sino que también es odiada por el PRD que la considera
como quién evitó que el partido del sol azteca tomara al sindicato de maestros.
Pero también la maestra se ganó la
animadversión de los dirigentes del PAN, pues mientras que se las ingenió para
sacarle a los presidentes azules todo lo que quiso, hasta imponerles su agenda
en materia educativa, desafió a Felipe Calderón, y al mismo tiempo el PANAL, sin ninguna lealtad
al PAN, se ofrecía en el mercado electoral al mejor postor, en ocasiones hizo
alianza con el PAN y en otra ocasiones con el PRI, esto se convirtió en un
descredito para la dirigencia panista y para el presidente de la república que
hicieron el ridículo en varias ocasiones ante las decisiones de la maestra. En
2012 el PANAL se alió al PRI y este en el último momento, ya en pleno dominio
de Enrique Peña Nieto se desdijo de su alianza y dejó al partido de la maestra plantado
y a punto de perder el registro, el cual salvó con la candidatura de Gabriel
Quadri.
Así que para el uno de diciembre del
2012 la suerte de la maestra ya estaba echada, sin aliados en ninguno de los
tres grandes partidos y por el contrario con formidable enemigos, entre ellos
el propio presidente Enrique Peña Nieto y todos los dirigentes de los partidos
políticos. Para entonces el desprestigio de la maestra era ya un lugar común,
se le llamaba la “Chuky”, se le proponía como imagen en las cajetillas de
cigarros para aterrorizar a los fumadores, todavía más se habían filtrado sus
excentricidades, como el guardarropas, los miles de pares de zapatos y bolsos de diseñador, la casa
mansión en San Diego California, y su propuesta de regalar a los dirigentes
seccionales “Hummers”, además irritaba su nepotismo al colocar a sus familiares
en altos puestos de la SEP y a su hija entre los diputados del Congreso,
incluso Televisa por lealtad a Enrique Peña nieto se sumó a la cargada contra
la dirigente vitalicia del todavía sobreviviente sindicato.
El problema con la maestra es que ella
fue producto del mismo régimen priista y por ende se benefició del sistema
corrupto e inexpugnable que le daba protección a prueba de todos, el sindicato
fue durante años uno de los ejes temáticos fundamentales de la demagogia
priista, así que la maestra montada en
ese poderoso gremio, protegido por la Constitución de la República y por las
leyes reglamentarias de toda especie, parecía invencible, pero como en el caso
de la reforma política del 2007, donde los tres partidos se coaligaron a
hurtadillas para correr a Carlos Ugalde del IFE, a pesar de su inamovilidad constitucional,
ahora los tres grandes partidos se coaligaron para reformar la constitución, para
cobrar venganza o para darle un escarmiento ejemplar a los priistas que quieran
pasarse de vivos….. como la maestra.
Así esto para nadie pasó desapercibido,
todos los medios de comunicación saben y todos los mexicanos con cerebro en el
cráneo sabemos que esta reforma constitucional solo tiene como finalidad el
ajusticiamiento, al precio que sea, de la maestra Elba Esther Gordillo, para lo
cual las condiciones son ideales, el presidente se encuentra en una feliz luna
de miel con la sociedad y con los partidos políticos que comparten este deseo
de ajusticiamiento a la maestra, también la líder sindical se encuentra en su
peor momento de impopularidad, carece de aliados fuera del sindicato y los
pocos que tiene, como Jorge Castañeda no van a voltear ni a decirle "Hasta la vista Baby".
Pero si este es el verdadero motivo de
la reforma constitucional ¿Por qué no se menciona todo esto en la iniciativa? Ni
siquiera se menciona una sola vez la palabra “sindicato” y en su lugar se
utiliza el genérico “magisterio”, simplemente porque sería una mezquindad
extraordinaria reformar la constitución para quitarse de encima a una líder sindical, pero tristemente esa es la única razón. Tampoco es cierto que la reforma obedezca a una medida contra la mala calidad de la educación pública,
pues también es mala educación no solo la primaria y media superior, sino la de las universidades, que son cuevas de pandillas enquistadas para enriquecerse y para
distribuir premios entre amigos y cómplices o simples reductos de porros y malvivientes.
Si realmente se quisiera hacer una
reforma que resolviera los grandes problemas nacionales, esta reforma debería hacerse al revés, empezar por las universidades que son agujeros sin fondo para el
Erario nacional, las universidades ostentan el mayor número de fósiles, de
porros, de cuentas negras, de pandillerismo y precisamente esta reforma premia
todo eso, al disponer explícitamente que las universidades no entran en este
proceso de evaluación que es utilizado exclusivamente para destazar al
sindicato creado por el propio PRI y que como una especie de Frankestein se
volvió en su contra.
Son muy importantes cálculos del presidente:
Primero, la iniciativa se presentó en pleno período vacacional para dar tiempo
a Elba Esther Gordillo de que reflexione y entregue la plaza sin disparar un
solo tiro; Segundo, al presentarse la iniciativa en vacaciones navideñas, la
Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) no tiene tiempo
para salir a las calles e intentar imponer su propia agenda sobre la mesa, Tercero,
en la misma situación estarán otros posibles actores, como el propio Andrés Manuel
López Obrador y sus leales.
En el caso de que la Gordillo diga “me
rindo” entonces la reforma seguiría su curso, pero la legislación reglamentaria sería tan
benigna con el sindicalismo charro que le permitiría al presidente imponer a un
líder de su agrado, pues no quiere lidiar con otro líder como la maestra que se
les salga del huacal, ni con un líder que provenga de la CNTE y menos con un líder
auténtico, emanado de un proceso interno democrático entre los maestros, no lo
que quiere la alianza PAN-PRI-PRD es un líder charro, sometido, obediente y que continúe con el liderazgo
del maestro Jongitud Barrios o el de Sentíes, o el de José Luis Andrade Ibarra, pues esos sí que
eran disciplinados. Ahhh que tiempos aquellos!!!!
Por Antonio Limón López.