Hace unos días, el Congreso
del Estado de Baja California votó en unanimidad por la desaparición
del Fuero establecido en la Constitución del Estado, y el mismo
Congreso presentó iniciativa ante la Cámara de Diputados a efecto
de derogar al Fuero establecido en la Constitución Federal.
No es Baja California el
primer estado en derogar al Fuero, ya lo han hecho Jalisco,
Veracruz, Querétaro y Campeche ¿Pero es esta reforma favorable a
los temas mas urgentes de México, como lo son la Democracia abortada
y a la siempre presente Corrupción?
Comprendo que es difícil
argumentar en favor del Fuero, sobre todo cuando en general los
funcionarios que gozan del fuero, sean electos o designados suelen
ser personajes de la picarda y la corrupción mexicana, sin embargo
el Fuero no fue concebido para proteger a los pillos, aunque estos
formen legión, sino para proteger a los políticos verdaderos que a
la sazón, son tan escasos.
Sin rodeos voy a citar un
buen ejemplo de político verdadero, que sin el Fuero ahora estaría
dedicado a sembrar coles y nabos en su finca; me refiero a Andrés
Manuel López Obrador, el político tabasqueño que entre 2004 y 2005
fue sujeto a un Juicio de Procedencia, indispensable para despojarlo
del Fuero de que disfrutaba como Jefe del Departamento del Distrito
Federal, con el propósito de ponerlo tras las rejas acusado de
Desacato a la Suspensión decretada por un Juez de Amparo.
Durante once meses, México
dejó de lado cualquier otro asunto, y se concentró en la épica
batalla del tabasqueño, no contra los poderes fácticos, sino contra
los poderes formales del Estado mexicano, contra el Poder Ejecutivo
representado por el Procurador General de la República que fue quien
solicitó a la Caámara de Diputados que se iniciara el Juicio de Procedencia, contra el Poder
Legislativo en cuyo seno se debió conceder el desafuero, y contra el
Poder Judicial, específicamente contra la Suprema Corte de Justicia de la
Nación que terminó haciendo el oso, ya que dijo y se desdijo,
quedando en el feo papel de mercenaria política.
Todo un tinglado legal, que
al menos en las formas aparentaba la pureza de un juicio llevado en
la civilizada Suiza, pero el único problema es que era en la Ciudad
de México.
Durante esos fatídicos once
meses, Andrés
Manuel López Obrador en plena libertad, lanzó todo el Poder fáctico de que disponía para acusar al Presidente Vicente Fox de que esta era una sucia maniobra para impedir que fuera el candidato de la izquierda en 2006, todos los días hábiles los dedicó a dar al menos una conferencia de prensa donde reiteraba su acusación, y esta conferencia de prensa, se transmitía en vivo y diferida por todo el territorio nacional.
Manuel López Obrador en plena libertad, lanzó todo el Poder fáctico de que disponía para acusar al Presidente Vicente Fox de que esta era una sucia maniobra para impedir que fuera el candidato de la izquierda en 2006, todos los días hábiles los dedicó a dar al menos una conferencia de prensa donde reiteraba su acusación, y esta conferencia de prensa, se transmitía en vivo y diferida por todo el territorio nacional.
Gracias al Fuero y a sus propios y personales poderes fáctico políticos y oratorios, López Obrador desacreditó a tal punto la acusación ante los mexicanos, que a pesar de que la Cámara de Diputados aprobó el desafuero y Andrés Manuel debió salir de la Jefatura de Gobierno, esto fue solo cosa de unos cuantos días, pues Vicente Fox no soportó la presión nacional e internacional y anunció que la acusación se volvería a analizar por el nuevo Procurador Cabeza de Vaca, ya que Macedo de la Concha renunció a su puesto.
Sin el Fuero, López Obrador
habría sido aprehendido a de regreso a casa, le habrían dado
“sabadazo” y la historia sería diferente.
Gracias al Fuero, Andrés
López Obrador ha sido el actor político mas constante en México,
desde 2004 y seguramente será....
Por Antonio Limón López.